Mi Héroe
Creo que
tenía 10 años, cuando esto me pasó.
Recuerdo
que me encontraba en mi casa recibiendo la visita de mis tíos y primos, un
noche de fiestas Patrias.
Me
encontraba divirtiéndome al corretear a mis primas y primos por toda la sala y el pequeño patio que daba al jardín.
Resulta
que mi papá, para esa semana, había contratado los servicios de un grupo de
albañiles para la construcción de un tanque subterráneo (cisterna). El trabajo
ya estaba hecho y solo se necesitaba una tapa, por lo que pusieron solo un pedazo de cartón como una
provisional.
Entonces,
empezamos a jugar a las escondidas, y me toco el turno de buscar. Estaba muy
agitado tratando de encontrar a mis primos, y no me fije por donde caminaba.
De pronto caí.
Mi reacción natural fue el de poner los brazos extendidos. Así, logre sujetarme por un buen rato.
De pronto sentía que la fuerza me vencía, sentí pánico. Justo en el momento que iba a soltarme, sentí los brazos fuertes de mi tío EBO.
De pronto caí.
Mi reacción natural fue el de poner los brazos extendidos. Así, logre sujetarme por un buen rato.
De pronto sentía que la fuerza me vencía, sentí pánico. Justo en el momento que iba a soltarme, sentí los brazos fuertes de mi tío EBO.
El me
retiro de aquel agujero sin ningún esfuerzo y me dijo “¿Como te pones a jugar
por ahí sin tener cuidado, muchacho?”
Le dí las gracias y llorando de felicidad le abracé.
Le dí las gracias y llorando de felicidad le abracé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario